El dirigente señaló que “quienes añoran las épocas de Patricia Bullrich deberían sincerarse y pedir con claridad su regreso”.
Luego de que el ex gobernador rionegrino y actual senador, Alberto Weretilneck, cuestionara la actuación del Ministerio de Seguridad de la Nación en el conflicto de Villa Mascardi, el secretario adjunto de ATE Nacional y secretario general de la CTA Autónoma Río Negro, Rodolfo Aguiar, repudió duramente sus dichos por “no tener justificativo en la realidad” y apuntó: “Aquí los supuestos buenos vecinos que defiende son Lewis, Zorreguieta, Roemmers y Benetton”.
“Dudamos que el senador esté realmente preocupado por una solución del conflicto a través del diálogo, ya que es precisamente la vía pacífica la que atenta contra los intereses inmobiliarios de un puñado de dueños de cabañas y estancias de la región”, afirmó el referente nacional. En los últimos días, la tensión en la zona sur de Río Negro se reavivó cuando un grupo de vecinos autoconvocados en un llamado ‘Banderazo Patriótico’ se movilizó violentamente contra los integrantes de la comunidad Winkul Mapu.
Ante los dichos del senador, Aguiar señaló que “no es la primera vez que se trata de presionar a autoridades del Poder Ejecutivo Nacional o a la Justicia, en este caso diciendo que no se pueden tomar como delitos menores los supuestos ataques de integrantes de la comunidad Winkul Mapu”, destacando que “lo que se intenta es crear un enemigo interno y fomentar el odio hacia los pueblos originarios”. Cabe destacar que en noviembre de 2017 y enmarcado en este mismo reclamo se dio el asesinato por la espalda de Rafael Nahuel en manos de efectivos de la Prefectura Naval. “Algunos añoran las épocas de Patricia Bullrich. Deberían sincerarse y pedir con claridad su regreso”, agregó.
El principal foco del conflicto se da por la enorme cantidad de hectáreas de tierras controladas por unas pocas personas (Zorreguieta, Benetton, Roemmers y Lewis). En esta línea, el adjunto de ATE concluyó: “Los sectores que defiende el ex gobernador son los mismos que subestiman a todo un pueblo pretendiendo hacernos creer que la RAM existe. Acá lo que existe es un creciente proceso de extranjerización de la tierra que cada vez se concentra en menos manos, mientras la inmensa mayoría de los trabajadores no puede acceder ni siquiera al terrenito propio”.