Esta mañana las oficinas administrativas de la Cooperativa 1° de mayo de General Roca amanecieron con cambios de cerradura y puertas rotas y la presencia de agentes de la Policía de Río Negro junto a otros de seguridad privada. En estos momentos los trabajadores con familias y la CTA Autónoma ocupan el establecimiento.
El gravísimo hecho que denuncian los cooperativistas ocurre en pleno proceso de acuerdo judicial con el dueño de la empresa que se fugó y ahora quiere recuperarla. También participan de las negociaciones el municipio local y el Gobierno de la Provincia.
Según el último fallo de la jueza Agustina Nafa del 15 de febrero de 2024, sin cumplimiento del acuerdo no podría haber desalojo. Por eso la CTA denuncia que el Ejecutivo provincial sigue sin garantizar el predio donde los ex cooperativistas puedan continuar su actividad laboral que, inicialmente, iba a ser el Parque Industrial II.
“Este atentado sólo vuela por el aire todo el puente construido en este tiempo. Dieran 20 pasos atrás”, dijo Claudia Reyes, coordinadora de la FeNaT de la CTA Autónoma. “Nosotros ahora vamos a cuidar nuestra cooperativa, sus libros contables y reforzar la presencia con la solidaridad de vecinos, familias y trabajadores de otras centrales”.
CTA ocupa el aserradero 1° de mayo en Roca tras el ataque violento de patotas
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