La Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) Autónoma volverán a marchar este 3 de junio en el marco del Ni Una Menos para reclamar políticas públicas que permitan frenar la violencia machista por la que de acuerdo al Registro Nacional de Femicidios de la Justicia Argentina, 251 mujeres fueron víctimas fatales de violencia de género durante 2021, es decir que se registró 1 femicidio cada 35 horas.
En este marco, justamente, desde la central obrera se vuelve a hacer hincapié en que la deuda “es con nosotras” no con el FMI.
“Habrá marchas en distintos lugares, ya que la situación no ha cambiado, los reclamos siguen siendo los mismos y estamos todavía peor que antes debido a la grave situación económica que atravesamos”, dijo Edit Rajneri, secretaria de Genero de la CTA Autónoma de Río Negro.
Así, la dirigente señaló entre otros puntos la necesidad de reconocimiento a las promotoras en violencia de género que trabajan en los barrios sin remuneración, un punto de partida que muestra la falta de medida concretas que sirvan a la erradicación de la violencia, así como un Poder Judicial dé las respuestas necesarias. Cabe destacar que según los últimos informes, el 93% de los atacantes de las 251 víctimas fatales de violencia de género fueron identificados, pero de ese total, al 31 de diciembre de 2021, solo el 66% estaba privado de su libertad con causas en trámite o condena.
Finalmente desde la CTA remarcaron: “Porque vivas nos queremos reafirmamos que la deuda es con nosotras. Salimos nuevamente a las calles para hacer escuchar nuestro grito de basta de femicidios. Exigimos al Estado emergencia ya en violencia contra las mujeres, el reconocimiento económico a las promotoras territoriales en prevención de violencia. Fuera el FMI: que la apaguen quienes se la fugaron. Somos las voces de las que ya no tienen voz todas unidas a las calles y plazas de la provincia”.
Cabe recordar que esta fecha se instaló en la agenda pública y política en el año 2015, cuando la Plaza del Congreso, en Buenos Aires, y cientos de plazas de todo el país se llenaron de miles de personas que alzaron la voz tras el asesinato de Chiara Páez. Desde entonces, organizaciones sindicales, sociales, culturales, políticas y vecinos en general visibilizan en este día demandas vitales para desterrar de una vez por todas la violencia machista.