El dirigente nacional señaló que “se trata de una importantísima medida que debería traducirse en una mejora para los pequeños y medianos productores”.

Luego de que el Gobierno nacional decretara la quita de retenciones a las exportaciones de peras y manzanas, el secretario adjunto nacional de ATE, Rodolfo Aguiar, advirtió que “cada vez que se lograron medidas de alivio fiscal para el sector frutícola, la historia demostró en nuestra provincia que terminaron beneficiando a los grandes exportadores y a las empresas multinacionales”.

“Sólo eso explica que de un Alto Valle en el que llegaron a existir más de 7.000 productores, en la actualidad no lleguen a ser mil. Esperemos que esta vez las mejoras les lleguen a ellos”, indicó el secretario general de la CTA Autónoma de Río Negro. A través del decreto 1055/20, el Ejecutivo dictaminó la extinción del tributo del 5% para este sector.

Se estima que el alivio fiscal será de 1.500 millones de pesos en promedio para los exportadores, pero Aguiar espera que “una medida tan importante redunde en beneficio de pequeños y medianos productores rionegrinos y no se transforme sólo en un gran negocio para un puñado de vivos que son los responsables del empobrecimiento generalizado de los chacareros de la región”.

El adjunto estatal evaluó que “el crecimiento en la concentración de la tierra y el desplazamiento desde una de las matrices productivas históricas de la provincia, como ha sido la pera y la manzana, hacia la explotación de gas y petróleo son uno de los mayores flagelos que hemos tenido que enfrentar los rionegrinos”. Cada temporada se exportan estas frutas por 430 millones de dólares desde la región. Por su parte, la ley entró en vigencia el primero de enero de 2021.